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lunes, 22 de septiembre de 2008

Por fin otoño


Hoy mi inspiración es nula, pero quería dejar constancia del hecho de que ha entrado mi estación favorita. Sobre todo en estos momentos...

4 comentarios:

SuperWoman dijo...

Llueve, llueve y no para de llover... estoy condenada a estar metida en casa con un torbellino de dos años. Hoy, desde luego, no comparto tu entusiasmo por esta estación.
Un supersaludo

Anónimo dijo...

Ojalá la inspiración vuelva pronto... A mí me ha dado pena entrar en el otoño, no porque no me guste, sino la constatación del paso inexorable del tiempo...

Maurus dijo...

A mí también me gusta el otoño. Realmente es el comienzo de una nueva etapa, de un nuevo año y no el 31 de diciembre, como indica el calendario.

Me gustan los colores del otoño; en él, la naturaleza nos da magistrales muestras de como deben combinarse. Las distintas tonalidades se entrecuzan sin desvarío, como notas de una sinfonía, quizá como el vals triste de Sibelius o la sinfonía inacabada de Schubert, nombres que tan a cuento vienen para la ocasión.

Es muy bonito pasear por el campo en estas fechas y sentir el melancólico y sutil crujir de las hojas, mientras vamos reflexionando y tratando de poner recapitular y poner en orden los capítulos transcurridos de la novela de nuestra vida.

Es el otoño, en fin, una estación mágica, que no debe verse como el fin de una etapa, sino como el comienzo de otra, de un tiempo nuevo en el que podemos dar un salto adelante.

Yvi, puedes ver que entramos en el otoño como un triunfo por haber llegado a él, tratando de disfrutar del presente y de todo lo que tenga que ofrecerte. No podemos luchar contra el inexorable paso del tiempo...eso es algo que no está en nuestras manos.

Un saludo a todos,

-Maurus

Anónimo dijo...

Hoy día 22 de septiembre ha comenzado el otoño astronómico, de nuevo un cambio de estación en el Ciclo de la Vida. Todo gira en un círculo que se repite una y otra vez.

Mientras llueve sobre la ciudad, las hojas de los árboles ya empiezan a caer cansadas del verano para unirse con la Madre Tierra en este Ciclo de la Vida.

Hoy día 22 de septiembre desde hace ya unos cuantos años, se "mal-celebra" el día internacional sin coches. Aunque lo de sin coches es un decir, quizá en los garajes, porque esta involución que llaman progreso nos obliga a desplazarnos sobre estos caballos de cuatro ruedas al trabajo, a los centros comerciales, a los pueblos...
Estos caballos de cuatro ruedas son fiel reflejo del espíritu que habita en la sociedad actual. Todos ellos conducidos por una sola persona, independiente y aislada del mundo exterior, con prisas y estresada por el frenesí diario.

Pero el Círculo de la Vida es sabio y nos devolverá a los comienzos. Todo es un Círculo. Solo hay que tener paciencia.

Y a mi, siguiendo el ciclo diario hoy sólo me queda ir a dormir mientras cuento las estrellas de mi universo interior.

Buenas Noches