
Imagino tus brazos que me rodean.
Casi siento tu calor que me envuelve.
Me imagino tu sonrisa, mi sonrisa, nuestras mentes sin pensamientos.
Y un cuchillo que nos atraviesa, y sangre que brota, y dolor y llanto.
Lágrimas rojas caen por mis mejillas mientras te miro. Y no entiendo nada...
No hay comentarios:
Publicar un comentario