Páginas

sábado, 21 de marzo de 2009

Mis dedos bajan por tu cuello.
...
Se posan en tu pecho.
...
Sienten tu latir alocado.
...
Empujan despacio.
...
Se hunden en la carne fresca.
...
Atraviesan piel y huesos.
...
Penetran hasta el corazón.
...
Que sigue latiendo.
...
Lo agarran con fuerza.
...
Y aprietan, y aprietan.
...
Hasta que el latido cesa.
...
Y la sangre mancha mis dedos.


No hay comentarios: