Cuenta una leyenda que una vez la luna se enredó en un árbol y un lobo se puso a jugar con ella, arrancándola de su eterna soledad. Pero el animal se fue y la luna, indignada, le robó su sombra. Desde entonces le aúlla por las noches pidiéndole que se la devuelva.
Febrero es el mes en que comienzan a aullar los lobos, en busca de lobas para aparearse. Le gritan a la luna la soledad y la desesperación que no les cabe en el pecho. Así noche tras noche, hasta que la luna les recompensa con una hembra de suaves patas y hocico negro.
3 comentarios:
Alice, si hay algo que a mí me ha sobrecogido hasta el ahogo, ha sido oir aullar a los lobos. Si ese es su reclamo a la luna, no me extraña que ésta termine apiedándose de ellos, porque oirlos, es como oir un lamento sin fin.
Precioso cuento. Como siempre, gracias.
me encanta la luna
me gustan los lobos
y
me emocionan tú y tus relatos
G R A N D E Alice!
pd: dentro de poco tu peli en 3D: alice in wonderland!, habrá que quedar para verla!!
Ysa, qué suerte haber escuchado a los lobos, yo sólo los he oído en los documentales. Gracias a ti.
Gracias de nuevo, toe; eso está hecho :-)
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